sábado, 24 de octubre de 2009

AaaaaBuuuuUrrrrRiiiiiiIddddDoooooooOs !!

la rutina aburre. Sin embargo, hacemos de nuestra vida lo mas rutinario posible para escapar de las sorpresas y los inconvenientes de ultimo momento. Nos encanta tener todo planificado y que las cosas salgan siempre como esperamos. Nos encanta hacer planes que nos transformen en "alguien". Por ejemplo, queremos ir a la u, estudiar un poco y ser bien vistos por los padres de nuestras novias. Queremos esforzarnos poco y tener los mansos trabajos para presumir frente a los demas de todas las cosas materiales que tenemos (por que eso es sinonimo de exito). Queremos ser reconocidos aun cuando no tengamos ni el mas minimo talento para nada. Tratamos de desmarcarnos de las modas y las tendencias para ser alternativos, incluso nos creemos el cuento de ser especiales, unicos e irrepetibles. Queremos de todas las maneras posibles mostrarnos como personas que no estan "dentro del sistema" (guacala ! que lugar mas comun) y vivimos -o al menos eso aparentamos- sin planificar o siquiera imaginar que es lo que vendra. Pero es evidente que solo somos uno mas, otro pelo de la cola y aspirantes a talentosos, cuando realmente solo nos quedamos en eso "en aspiraciones". Ademas tenemos todo brutal y rutinariamente planeado. Cuando, como, donde y con quien. No hay espacios para la sorpresa, y cuando aparece, nos escondemos y renegamos. Nos asusta todo lo nuevo y desconocido. Preferimos ser los tuertos en el pais de los ciegos antes de ver las cosas con ambos ojos y aprender realidades nuevas. Basicamente, nos conformamos con poco.
Por eso no me gusta la gente aburrida. Siempre sabes que va a pasar, sus esquemas, problemas y salidas. Todo tan estructurado y previsible. Aburrido, simple y desechable. Asi como una pelicula fome. Desde el primer cuadro sabes como va a terminar y por eso mejor no pierdes el tiempo, cambias de canal y te quedas con las buenas.

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